El robot, que inicialmente estaba siendo desarrollado en solitario por Kurata, cuenta actualmente con Wataru Yoshizaki en el equipo, que se encarga del desarrollo del sistema de control gracias al sistema “V-Sido” que desarrollara en el 2008 para controlar pequeños robots.
El robot, llamado Kurotatsu, tiene capacidad para un solo tripulante, mide 4 metros de alto y de ancho tendrá unos 3 metros. Debido al peso del acero en que está construido, la criatura alcanza las 4 toneladas de peso.
En esta imagen a escala podéis ver cómo quedará Kurotatsu una vez completo y su
escala con el tamaño de una persona.
escala con el tamaño de una persona.
Los laterales de Kurotatsu siguen en construcción, así que desde uno de los lados podemos ver el interior de la cabina.
En esta otra imagen podéis ver el imponente aspecto de Kurotatsu desde abajo. Así le verán los que no monten en él.
En el momento en el que se hicieron estas fotos, las piernas del robot ya iban adoptando forma.
Kurotatsu funciona con una Bomba Hidráulica movida por un motor diesel, lo que se denomina un Grupo Hidráulico diesel.
Con la cabina montada sobre las piernas, la altura del robot ya está casi completa, aunque todavía le faltan las ruedas.
El trabajo de Kurata no cesa ni durante las sesiones de fotos.
La cabina se abre alzando la compuerta frontal hacia arriba gracias a sus sistemas hidráulicos.
En la siguiente imagen se puede ver al señor Yoshiaki en la cabina del piloto haciendo unos ajustes al monitor de la misma.
Las manos de Kurotatsu funcionan con una gran suavidad pese a tener una sola junta en cada uno de sus puntos de inflexión.
El señor Kurata y el señor Yoshizaki se complementan perfectamente en su trabajo. Para Kurata, el que Yoshizaki se uniese a su peculiar odisea fue todo un soplo de aire fresco, especialmente en cuanto al sistema de control se refiere, muy rudimentario en los primeros conceptos del artista. El sistema V-Sido ha sido la clave de control de Kurotatsu desde que se formó el equipo, y como podéis ver, cuenta con un simulador de físicas muy avanzado que tras ser adaptado desde su formato original para controlar pequeños robots, convertirá a Kurotatsu en un robot capaz de responder en tiempo real a las órdenes de su piloto.
Os dejo un vídeo demostrativo de cómo funciona dicho sistema.
El “prueba y error” están siendo constantes en un proyecto al que todavía le queda bastante camino por recorrer, pero desde luego parece que tarde o temprano llegará a buen puerto. Ahora las preocupaciones de muchos netizens derivan en que alguna empresa o directamente el gobierno japonés, quieran apropiarse de un diseño casero para convertirlo en algo más. ¿Paranoias? Tal vez no. Alguna vez tendremos que ver este tipo de robots en funcionamiento.
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